Sí, uno de los sueños de todo hombre es mantener una piel joven y tersa pese a los continuos afeitados a los que la sometemos día sí y día también.
Para ello, te vamos a dar algunos consejos.
Limpiar, exfoliar, hidratar. El régimen de cuidado de la piel más esencial incluye tres cosas: limpieza, exfoliación e hidratación. Debes limpiarte la cara por la mañana cuando te levantes y otra vez antes de acostarte, para quitar de los poros cualquier acumulación de la almohada y el sudor, así como las toxinas ambientales y la mugre.
Después del lavado, debes exfoliar la piel, pero solo dos veces por semana.
Mañana y noche rehidrátate con un humectante para restaurar la capa protectora de la piel y evitar que las toxinas entren en los poros.
Por la noche, la crema más densa. Puedes sustituir la aplicación humectante con una crema de noche, que está repleta de nutrientes adicionales que las células pueden absorber mientras dormimos.
Es importante tener una estrategia de cuidado de la piel a la hora de acostarse porque la regeneración celular ocurre mucho más rápido a la hora del descanso nocturno.
Compra una crema de noche que se centre en la reparación y el antienvejecimiento.
Prueba el retinol. El retinol es un derivado de vitamina A que casi todos los dermatólogos consideran “el milagro producto anti-envejecimiento”. El uso prolongado de retinol en realidad revierte las líneas finas, las arrugas, las manchas oscuras y el acné.
Pero hay muchas precauciones que debes tomar con el retinol: evita la luz solar sin protector, solo úsala antes de acostarte y, si tienes la piel clara, prepara un pequeño peeling de la piel mientras se adapta a ella.
Tu cuerpo -cada función, no solo la regeneración de células de la piel necesita este tiempo para recargarse, y si rutinariamente pierdes una noche de descanso completa, comenzarás a agregar años a tu preciosa cara.
Crema de ojos. Una crema para los ojos también tiene nutrientes más específicos que una crema hidratante tradicional, diseñada para la piel delgada que rodea los ojos.
Usar una diariamente evitará manchas oscuras y círculos debajo de los ojos, minimizará la hinchazón y mantendrá a raya a las patas de gallo.
Beber (mucha) agua. Así como necesitas dormir lo suficiente para mantener tu piel juvenil, debes mantenerte muy bien hidratado para mantener tus funciones corporales completamente nutridas.
La deshidratación produce piel seca y quebradiza, acné, reparación más lenta… Vacía las toxinas del cuerpo, proporciona nutrientes y te mantiene luciendo joven todos los días y a largo plazo.
Adiós cafeína, azúcares añadidos y alcohol. El antagonista en tu búsqueda de la juventud tiene tres caras: cafeína, azúcar y alcohol.
Estos vicios resecan la piel, obstruyen los poros y comprometen el sueño (que, como sabes, es perjudicial para poseer un aspecto juvenil).
Limítate a un café por las mañanas, mantente alejado de los productos ultraprocesados y, por supuesto, no te pases con las copas.
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